Todas las personas tienen el derecho a recibir información a tiempo y de calidad que les permita avanzar en la toma de decisiones y los haga partícipes de sus procesos de salud. Este proyecto recoge los principios de accesibilidad cognitiva para ponerlos al servicio de la comunidad, mostrado con ello que profesionales con discapacidad intelectual y otras condiciones del desarrollo pueden aportar al desarrollo social, generando como valor agregado oportunidades laborales para un colectivo, siempre excluido, que representa el quinto quintil más pobre de la población.
El objetivo principal es desarrollar un modelo que permita la adaptación desde un enfoque de accesibilidad cognitiva de procesos médicos de baja, mediana y alta complejidad en salud.
Los investigadores responsables del proyecto son Manuel Ortíz, Marcela Tenorio y Stefano Biancardi.