Este estudio analiza la evolución de las habilidades funcionales de las personas mayores en relación a su salud mental, antes y después de la pandemia de COVID-19.
Según el estudio, los patrones en que evolucionan las limitaciones funcionales a través del tiempo, transitando entre niveles de limitaciones bajos y altos, se relacionan con peores estados de salud mental tanto antes como después de la aparición de la pandemia. Luego del inicio del COVID-19 la depresión aumentó en la mayoría de los grupos estudiados, en especial en aquellos con evolución de habilidades funcionales poco definidas.
Los autores sugieren que la relación entre la evolución de las habilidades funcionales y la salud mental, requiere un cambio de paradigma que guíe la política pública distinto de la edad. La publicación además destaca la necesidad de adoptar estrategias para mejorar el nivel de funcionalidad de la población como una política eficiente para abordar los desafíos de la longevidad.