Por Andrés Aparicio y Alejandra Inostroza.
En este contexto, la tecnología surge como una herramienta prometedora para mejorar la calidad de vida de estas mujeres. Nuestra revisión de literatura indica que ciertas tecnologías, como aplicaciones móviles, plataformas digitales y dispositivos de monitoreo de salud, tienen el potencial de reducir significativamente el estrés, aliviar la ansiedad, mejorar la calidad del sueño y fomentar el autocuidado entre las cuidadoras informales. Estos beneficios se logran al facilitar tareas diarias, brindar acceso inmediato a información relevante, y permitir el fortalecimiento de redes de apoyo virtuales. La motivación de las cuidadoras también mejora al experimentar resultados tangibles en la salud y bienestar de las personas a su cuidado.
A esto se suma una problemática estructural grave: la escasa capacitación formal y apoyo institucional disponible para las cuidadoras informales. Solo entre el 8% y el 15% de las personas cuidadoras ha recibido alguna vez capacitación formal relacionada con las tareas de cuidado, a pesar de que casi la mitad expresan interés por recibir dicha capacitación. Esta brecha en formación contrasta con la necesidad de desarrollar habilidades técnicas para manejar adecuadamente soluciones tecnológicas que podrían aliviar significativamente sus tareas cotidianas.
Además, la revisión señala barreras específicas relacionadas con el uso de tecnología. Muchas cuidadoras enfrentan estrés adicional derivado de fallos técnicos o problemas de conectividad. La complejidad técnica y la necesidad constante de actualización tecnológica también se destacan como obstáculos relevantes, particularmente para las cuidadoras mayores, quienes pueden mostrar resistencia al cambio generacional y dificultades para adaptarse rápidamente a nuevos sistemas.
Un aspecto central que se desprende de la revisión es la ausencia de estudios latinoamericanos sobre los impactos de la tecnología en el bienestar de las cuidadoras informales. Esta falta de evidencia local tiene implicancias significativas para Chile. Los contextos culturales, económicos y territoriales de América Latina, incluyendo las dinámicas familiares, la accesibilidad económica y la infraestructura tecnológica disponible, juegan un papel decisivo en la efectividad y adopción real de estas herramientas. Sin investigaciones situadas en nuestra realidad, corremos el riesgo de implementar soluciones tecnológicas importadas que podrían no responder adecuadamente a las necesidades reales y específicas de nuestras cuidadoras informales.
En conclusión, es claro que la tecnología tiene un gran potencial para beneficiar a las cuidadoras informales chilenas, ofreciendo importantes mejoras en su bienestar físico, emocional y social. Sin embargo, estos beneficios solo se harán realidad si la tecnología viene acompañada de un apoyo integral: capacitación formal continua, políticas públicas sensibles a la realidad territorial, redes sólidas de apoyo comunitario y, sobre todo, un enfoque explícito de género que reconozca las desigualdades estructurales subyacentes al cuidado informal.
Chile se encuentra en un momento clave para abordar esta problemática desde una perspectiva integral. Por ello, hacemos un llamado urgente a autoridades políticas, instituciones académicas y a la sociedad civil para trabajar conjuntamente en la construcción de una política pública de cuidados que incluya la tecnología como un componente esencial. Reconocer, apoyar y mejorar las condiciones de vida y trabajo de quienes cuidan constituye un acto fundamental de justicia social. Solo así podremos avanzar hacia una sociedad más equitativa, solidaria y consciente de que cuidar a quienes cuidan es, finalmente, cuidar el futuro de todas y todos.
*Aparicio, A., Inostroza-Correa, M. A., Miranda, P., Salinas, C., Herskovic, V., Chackiel, C. & Alarcón, C. (2025). The impact of technology use for care by informal female caregivers on their well-being: a scoping review. Systematic Reviews.
Instituto Milenio para la Investigación del Cuidado (2023). Estudio MICARE 2023 Personas Cuidadoras y Trabajo de Cuidado en Chile (M. Fernández & V. Jorquera-Samter, Eds.). MICARE.